sábado, 4 de noviembre de 2017

5 criterios para asegurar la institucionalidad en la UNL

Los retos del "movimiento de cambio" para el 2018 en la Universidad Pública Lojana

  1. Comunidad Universitaria por sobre grupos partidistas:  la unidad de un movimiento académico que se identifica con los objetivos institucionales y los fines sociales que la Universidad debe prestar. Los objetivos del bien común aseguran una base sólida en el nuevo movimiento docente UNL.
  2. Evitar la atomización de las propuestas de cambio: una práctica muy conocida en la Universidad es el fraccionamiento, virus que el “movimiento de cambio” que busca institucionalizar la Universidad y garantizar los derechos fundamentales, sociales, políticos y económicos de su comunidad, debe anular efectivamente.  La pugna de liderazgos y la atomización de sus propuestas en la organización FIU permitió que un poder inescrupuloso (que nació en su propio seno) gobierne durante 10 años la UNL sin que exista capacidad de reacción.
  3. No centrar las acciones del movimiento en la definición de puestos directivos: si bien los cambios de la LOES nos darán la posibilidad de elegir decanatos,  el “movimiento de cambio” deberá centrar su actividad en el seguimiento a los debidos procedimientos y al apego a las normas de parte de quienes ejercen el poder; sobre quienes ostenten puestos de dirección deberá estar presente el control social de la comunidad universitaria como herramienta fundamental para la garantía de transparencia en su núcleo político y democrático, que es la Asamblea.
  4. Plantear planes a largo plazo y ensanchar la visión docente: era costumbre el condicionamiento de las expectativas y visión del cuerpo de docentes, al punto de remitirse a establecer como objetivo primordial, el lograr un nuevo contrato cada año. El desarrollo humano del capital docente que hoy posee la UNL depende de planes a largo plazo y de una seria planificación para potenciar las actitudes y destrezas que éste posee.
  5. Búsqueda de voluntad política para anular las mafias internas y externas que pesan sobre la UNL: por lo que la habilidad del liderazgo deberá contar con personalidades que puedan atraer el respaldo político necesario y concreto para la institucionalización del alma máter, así como el apoyo de la comunidad universitaria a nivel interno. 

Nasa Docencia
Redacción

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